Cuando se realizan impresiones donde se superponen dos colores, es habitual que aparezcan ciertos errores que se manifiestan en un borde blanco o de color claro. Este molesto problema impide que el resultado final de la impresión sea fiel al diseño deseado, por lo que es necesario aplicar técnicas que los solucionen.
El trapping es el método habitual que se suele utilizar para solventar el problema del borde, o líneas blancas, entre distintos colores en la impresión. Una técnica sencilla y rápida de aplicar que proporciona resultados óptimos.
Tabla de contenidos
Qué es el trapping
El trapping, en artes gráficas, es una técnica que se utiliza para evitar que aparezcan espacios en blanco entre dos colores diferentes. El ajuste entre planchas de impresión cuando se utilizan distintos colores no es perfecto, por lo que pueden aparecer en los bordes tonalidades diferentes (normalmente blancas) que la técnica de trapping solventa.
En qué ocasiones se usa el trapping
A la hora de unir diferentes colores en una impresión, se generan tonalidades claras que rompen la transición o unión entre ambos. Para evitar este problema, se utiliza el trapping o técnica de superposición entre objetos y colores. Los motivos por los que se genera este efecto de contorno blanco que necesita del trapping para solventarlo son:
- Cuando los impresos o publicaciones no están ajustados perfectamente.
- Por deformaciones del papel debido a fuerzas y presiones mecánicas, razones de temperatura o por la humedad.
Cómo se aplica el trapping
El trapping, en impresión, se aplica expandiendo ligeramente los objetos que componen un diseño gráfico para superponerlos unos milímetros. Esta superposición evita que aparezcan esos bordes o filos blancos entre la unión de colores que arruinan el diseño y los resultados esperados. Existen dos formas de aplicar el trapping para evitar los bordes blancos.
A través del diseño (preimpresión)
Los propios diseñadores pueden tener en cuenta este error habitual de impresión y ajustar sus diseños superponiendo ligeramente los objetos o elementos de sus diseños en el proceso de preimpresión. Se trata de una solución óptima, ya que no requiere ningún trabajo con respecto a impresión y garantiza que los trabajos lleguen a imprenta libres de este problema.
Al realizar la impresión
Para aplicar la técnica de trapping en el momento de la impresión, es fundamental el orden en el que se imprimen las tintas para alcanzar el color deseado. Cuanta más adherencia disponga la tinta, mayor será el trapping conseguido.
El valor estándar de trapping en impresión es del 75 %, mejorando los resultados que se obtienen si se eleva este porcentaje.
Hemos hablado de trapping, qué es, cuándo y cómo debes aplicarlo de forma correcta para garantizar que las impresiones que realicen sean fieles al diseño. Con esta técnica, evitarás esos molestos bordes blancos que muchas veces aparecen en las impresiones cuando se superponen dos colores.
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