Para conseguir ventas en un establecimiento físico, hay que conseguir atraer al cliente hacia dentro del local y esto es algo que se logra a través de las técnicas de escaparatismo. Aunque han cambiado con el paso del tiempo, una decoración llamativa sigue siendo igual de efectiva hoy en día, tal y como era hace unas décadas.
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Qué es el escaparatismo
El escaparatismo es mucho más que una técnica de marketing, es un auténtico arte. En concreto, el arte de exhibir la mercancía de forma que esto cause un gran impacto sobre los viandantes y genere en ellos la necesidad imperiosa de entrar en el establecimiento y adquirir sus productos.
Los minoristas saben muy bien que el diseño de escaparates es una de las mejores herramientas cuando se trata de aumentar el volumen de personas en la tienda y, en consecuencia, la cantidad de ventas conseguidas.
El escaparate es un primer punto de contacto entre la empresa y los posibles clientes, así que no solo debe mostrar productos, debe transmitir la identidad de la marca. Veamos cómo se puede conseguir esto.
Las mejores técnicas de decoración de escaparates
Contar una historia
En lugar de disponer los objetos de forma individual, el escaparate puede contar una historia a quien lo mira.
Por ejemplo, en una tienda de ropa, nos puede presentar a cinco niños que están listos para su primer día de colegio, mientras que en un comercio de artículos para el hogar nos puede mostrar una mesa preparada para recibir a los invitados a una fiesta.
Crear escaparates de temporada
Los negocios pueden ser más o menos estacionales, pero sus escaparates siempre deberían intentar adaptarse lo máximo posible a cada época del año. Que quien lo mire sienta una cierta identificación entre el escenario que ve y la época en la que se encuentra, con independencia de lo que venda la tienda.
Por ejemplo, con ayuda de un especialista en diseño gráfico se puede crear un pequeño escenario que refleje una playa en pleno verano, una aterradora casa de Halloween, o un bonito paisaje navideño. Este fondo, por sí solo, ya capta la atención, así que lo que resta es colocar los productos con buen gusto.
Para ampliar este apartado, te dejamos con algunas ideas para decorar escaparates en verano.
Actualizar el escaparate con frecuencia
Diseñar un escaparate no siempre es fácil y algunos resultados son tan buenos que gustaría conservarlos para siempre, pero esto no es viable. Si la ventana de un negocio muestra lo mismo durante mucho tiempo seguido, pierde su cualidad de llamar la atención del paseante, porque la mayoría de los que frecuentan la zona ya lo habrán visto.
Lo ideal es cambiar el escaparate una vez cada tres o cuatro semanas. No hace falta una renovación total, pero sí cambiar algunos elementos básicos para que se vea renovado y capte de nuevo el interés.
Las técnicas de escaparatismo son muy efectivas. La clave del éxito está en conocer bien al público al que se dirige el producto mostrado y crear escenarios que sean capaces de llamar su atención.